Impresionante colapso de $8 mil millones: ¿Puede América recuperar su liderazgo en energía limpia mientras China y Europa avanzan?
América enfrenta una caída récord en la inversión en energía limpia mientras los rivales globales desvían capital verde. ¿Las políticas de EE. UU. provocarán un regreso en 2025?
- $8 mil millones en inversiones en energía limpia de EE. UU. canceladas en el primer trimestre de 2025—la mayor caída en la historia
- 16 proyectos renovables importantes cancelados o retrasados este año
- $680 mil millones en inversión anual de China en fabricación de energía limpia
- 10% del PIB de China ahora alimentado por energía verde en 2024
El sector de energía limpia estadounidense acaba de sufrir su mayor caída en inversión: $8 mil millones desaparecieron a medida que los vientos políticos cambiaron en Washington. A medida que la administración Trump incrementa el apoyo a los combustibles fósiles y reduce los incentivos renovables, empresas importantes como Kore Power y Bosch están cancelando audaces proyectos de baterías, solares e hidrógeno en EE. UU.
La confianza de los inversores está en caída libre. El influyente Índice Nasdaq Clean Edge Green Energy ha tenido un rendimiento inferior al S&P 500 desde enero de 2025. Mientras tanto, una lista creciente de posibles gigantes de energía limpia está huyendo de EE. UU., en busca de estabilidad política y mejores rendimientos en el extranjero.
¿Por qué se están cancelando los proyectos verdes en EE. UU.?
La incertidumbre política es la principal culpable. Si bien la Ley de Reducción de la Inflación encendió un entusiasmo por las energías renovables en EE. UU., una serie de órdenes ejecutivas ahora favorecen los combustibles fósiles sobre las nuevas tecnologías verdes. Los subsidios se están agotando, las reglas ambientales se están eliminando y las tensiones comerciales internacionales están aumentando los costos de materiales vitales como el polisilicio.
El fabricante de baterías Freyr, ahora T1 Energy, acaba de cancelar una enorme fábrica de $2.5 mil millones en Georgia. Bosch abandonó una inversión de $200 millones en hidrógeno en Carolina del Sur, prefiriendo el paisaje regulatorio más predecible de Europa. Las startups de energía solar, eólica y vehículos eléctricos en todo el país están reconsiderando sus planes de expansión a medida que las dudas sobre futuros créditos fiscales, aranceles y políticas de carbono aumentan.
¿Se ha acabado la transición verde en América?
Las fuentes dicen que no del todo. A pesar de estos retrocesos históricos, las proyecciones sugieren que América aún agregará más capacidad renovable en 2025. Estados como Texas, que se benefician tanto de la energía eólica como solar independientemente del apoyo federal, están liderando la carga. Sin embargo, a nivel nacional, la incertidumbre está nublando las perspectivas y el pipeline de energía limpia se está desacelerando.
¿Adónde está yendo todo ese capital verde?
Mientras los inversores de EE. UU. dudan, los rivales están acelerando su entrada. El gobierno del Reino Unido está cortejando agresivamente la financiación de energía limpia. En la reciente Conferencia de Energía y Seguridad en Londres, el Primer Ministro Keir Starmer emitió una invitación abierta a las empresas globales para «construir el futuro de la energía» en Gran Bretaña. A pesar de que la economía europea se arrastra, sus líderes están aprovechando el momento para arrebatar inversiones a América.
Mientras tanto, China está jugando un juego completamente diferente. A medida que Washington se aleja de los compromisos climáticos, Pekín está implementando vastos nuevos incentivos, transparencia en la cadena de suministro y apoyo práctico para los fabricantes. En 2024, las ventas e inversiones en energía limpia en China se dispararon a un asombroso $1.9 billones—un 10% del PIB nacional. No es de extrañar que China siga siendo el líder indiscutible en paneles solares, baterías, turbinas eólicas y vehículos eléctricos.
¿Cómo puede EE. UU. recuperar su impulso verde?
Los principales analistas están de acuerdo: la consistencia y la claridad son esenciales. Los inversores anhelan incentivos estables y reglas duraderas, no oscilaciones extremas con cada nueva administración. Si bien los subsidios tributarios están en debate, las señales políticas a largo plazo claras atraen empleos, manufactura e innovación. Sin ellas, Wall Street—y los líderes tecnológicos globales—seguirán buscando en otros lugares.
Los rivales de América ya han tomado la indirecta. La UE, el Reino Unido y China están simplificando regulaciones, ampliando la infraestructura de la red y prometiendo audazmente recompensas por la reducción de carbono. Su mensaje a los inversores globales: Hay un futuro en la energía verde aquí, incluso si América duda.
¿Qué viene para los inversores en energía limpia de EE. UU.?
Una espera nerviosa. Con fábricas detenidas, cronogramas deslizándose y capital fluyendo al extranjero, es un momento crítico para las energías renovables estadounidenses. En juego: el liderazgo en las industrias de billones de dólares que están dando forma a la economía del siglo XXI.
Lee más sobre las tendencias energéticas globales en IEA y mantente al tanto de los cambios en el mercado en Bloomberg.
No dejes que EE. UU. se quede atrás—exige certeza para la energía limpia americana ahora. Revisa esta lista de acciones y presiona por un cambio:
- Monitorea nuevas políticas energéticas federales y estatales
- Apoya incentivos claros y consistentes para tecnología limpia
- Involúcrate con líderes locales y nacionales sobre inversión en infraestructura
- Sigue las tendencias con fuentes confiables como DOE y CNBC
- Defiende la innovación y la inversión en tu comunidad